Hoy
accedemos a un fenómeno viral: una feroz campaña marketinera de personaje que
buscan popularidad en podcasts, canales de youtube y programas de periodismo
amarillista a más no poder. También hemos visto en muchos canales periodísticos
(francamente muy pocos serios y efectistas y con tono burlón) exponer algunos
casos en donde es el propio protagonista que busca contar su experiencia
(ejemplo del caso de Irma Rick autoexpuesta y expuesta por su familia a un
canal conocido por su efectismo y pésimo tratamiento del tema ufológico). Y
como en todo hay abducidos honestos y farsantes. Hoy por hoy vemos a
"algunos" abducidos (no todos), haciendo su propia campaña de
marketing, en distintos medios audiovisuales y en la red; y generalmente no son
los casos más representativos de una experiencia de abducción.
Demás
está decir que hay personajes coloridos también sacando fotos que luego
terminan siendo insectos (rods) o planetas (como júpiter). Este tipos de
perfiles, no necesariamente buscan oportunidades económica, sino más bien visibilización
en medios y reconocimiento del público. En muchos casos son personalidades
narcisistas con déficits en las relaciones parentales, que atacan a quienes,
con sentido crítico y objetivo dudan de la experiencia debido a la evidente
ausencia de la más mínima evidencia. Son los mismos que se quejan de que
investigadores serios no se ocupen de su caso, o que profesionales de la salud
mental o de cualquier otro ámbito investiguen y validen su caso
Hay
algunos (no todos) en el mundo de la ufología que se enojan fácilmente cuando
se habla seriamente acerca de las evidencias en este territorio, a veces
testimonial, a veces bizarro, y las menos y son
justamente algunos de ellos lo que se dedican a exponer los casos, a
veces con el consentimiento del protagonista y otras no. Además se enojan cuando
profesionales de distintas áreas se dedican a investigar y comprender los casos
que algunos de ellos no hacen muy bien por carecer de las herramientas y quedar
en evidencia.
Es
notorio que algunos personajes del ambiente ufológico que convocan al público a
hablar sobre el tema, publicar fotos de braseros, sombreros, y cualquier cosa
que se asemeje a un disco volador y promocionarlas en muchos casos, afectando
la credibilidad (hoy mínima) del campo de investigación en ufología.
Muchos
grupos de investigación ufológica y por fuera de la misma, han marcado la
diferencia (el CIFO, por ejemplo con el Dr. Berlanda y el Lic. Acevedo) que han
trabajado estos casos con mucho respeto y han formado parte de la comunidad
ufológica siendo reconocidos por muchos de sus pares, (otro ejemplo es el del
matrimonio Grosso y su excelente investigación).
En
cuanto a la intervención de un psicólogo o un profesional de la salud mental, la
experiencia de abducción es por definición una experiencia de un sujeto, un
relato subjetivo en donde una persona experimenta un hecho, en general de
caracter traumático (muy diferente al perfil de un contactado), es ese hecho
mismo el que habilita al campo de la salud mental (psicología, psiquiatría) a
abordarlo. El tema de la evidencia adicional si se presenta es trabajo de los
investigadores en ufología. Tanto el excelente equipo de investigación El origen
como el propio Juan Bautista (a quienes agradezo mucho), buscaron el
asesoramiento del caso conmigo; siendo el proceso psicodiagnóstico una
herramienta no tanto para evaluar la veracidad del caso sino para llevar a buen
puerto la tormenta emocional y física que esta experiencia produce en los que
la experimentan.
Afirmo,
de hecho, hecho que este tipo de experiencias no debe ser tratada "solo
por un psicólogo o un profesional de la salud", sino que debe ser una
actividad multidisciplinaria, pero el carácter traumático de la
"verdadera" experiencia es evidente; algo que comenté en el programa.
El valor del trabajo psicoterapéutico no debe tampoco ser minimizado o excluido,
cuando en muchos casos dicho carácter traumático llega a estar al borde de
destruir la vida personal y familiar del individuo (conozco varios ejemplos de
ello). Y es por ello que se aconseja muchas veces la contención a través de la
terapia, sea de un profesional que participe de la visión de la ufología, o
alguien ajeno a la misma que trabaje los trastornos de estrés postraumático. En
mi caso personal el trabajo lo realizo gratuitamente, por lo cual el costo de
este aporte no debería ser un problema para aquellos que lo soliciten. También
existen muchos profesionales en el área del tratamiento del estrés
postraumático por fuera de la ufología que son recomendables y accesibles.
En
cuanto a aportar una solución, no nos arrogamos la posición egoica que algunos
miembros de la ufología tienen, de ser los portadores de "la verdad"
en este y muchos otros temas. Es la intención de este sitio el intentar
comprender una parte del fenómeno y ofrecer alternativas y apoyo a aquellos que
en silencio sufren estas experiencias y sus consecuencias; ni más ni menos. Si
la experiencia es objetivamente real o parte de un contenido onírico es algo a
discutir. Cada no sacará sus propias conclusiones. El único manifiesto
biológico del fenómeno es la evidencia de marcadores biológicos en esta
experiencia por parte de investigadores de la talla de Eduardo y Liliana Grosso
(ese no es mi campo se lo aseguro). Y el carácter legal de la experiencia de es
un asunto que le compete tanto al experienciante si desea denunciarlo
legalmente, como de la medicina y psiquiatría forense, aunque no hay denuncias
oficiales que yo conozca.
Hay
que recordar, a aquellos debunkers de la psicología y la salud mental en
general, que ha habido y hay algunas figuras internacionales muy famosas
involucradas en el tratamiento de este tipo de experiencias, son profesionales
de la salud convocados por investigadores: el Dr. John Mack médico psiquiatra
de Harvard convocado por Budd Hopkins y el Dr. Kenneth Ring profesor de
psicología de la Universidad de Connecticut, convocado nada más ni nada menos
que por "Whitley Strieber investigador y escritor de su propia experiencia
de abducción en el libro "Comunión.
EL
PROBLEMA DE LA EVIDENCIA.
En
general nos encontramos con casos en los cuales la experiencia de abducción
consisten únicamente en relatos subjetivos casi sin carga probatoria.
Es
importante, sin embargo analizar el relato y el tono del mismo, en los cuales
se puede apreciar un episodio de carácter traumático con signos inequívocos de
trastornos de estrés postraumático, que incluyen importantes episodios de
angustia, y en donde no se encuentran marcadores de psicopatología evidente;
relato que habla posiblemente de una experiencia fuera de lo común. Pero sin
evidencia adicional el evento queda solo como un relato subjetivo.
Los
investigadores Eduardo Grosso y Liliana Flotta en su brillante libro de
investigación del fenómeno llamado “Terror Nocturno” describen no solamente el
perfil psicológico de este tipo de experiencias sino que también incluyen el
concepto de “marcadores biológicos” indicando que la experiencia de abducción
incluye evidencia médica de cambios metabólicos en las víctimas de estos
encuentros:
MARCADORES
EN EXPERIENCIAS DE ABDUCCION Y VISITAS DE DORMITORIO
1-El
/la conyugue permanece dormido o en estado de inconsciencia.
2-Explosiones
de luz en la habitación
3-Tipo
y factor de sangre (0+ y 0-), menos frecuentes factor RH- (A o B)
4-Sangrado
de nariz y oreja
5-Inhibición
del ciclo de Krebs
6-Reacciones
antiinflamatorias
7-Aumentos
de anticuerpos
8-Alteraciones
ATP (falta de energía)
9-
Presencia de marcas en el cuerpo (algunas de tipo triangular) en la nuca axilas
brazos orejas y otras áreas del cuerpo. No explicables por lesiones tradicionales
enfermedades de piel o por somatización.
10-Desarrollo
intelectual fuera de lo común y en algunos casos habilidades paranormales
confirmadas (habilidades telepáticas, de curación, fenómenos poltergeist en su
domicilio, Pk)
11-En
el caso de visitas de dormitorio (supuesta variante de abducción) alteraciones
eléctricas en aparatos domésticos. Cargas electrostáticas, fenómenos EM.
Citando
las declaraciones de estos investigadores también encontraron:
“Cuando estudiamos los
primeros casos de Visitantes de Dormitorio, viendo la disparidad en los
protagonistas con respecto a edad, se nos ocurrió que debíamos buscar un
denominador común que los agrupara de alguna manera.
Habíamos supuesto que
las abducciones y por lo tanto las experimentaciones en los testigos, se
realizaban durante la edad fértil de éstos. Sin embargo, nos encontramos con
protagonistas, tanto mujeres como hombres, de más de cincuenta (50) años de
edad, que tenían repetidamente las experiencias de Visitantes de Dormitorio.
Más aún, en el caso de mujeres transitando la menopausia. También, como otros
investigadores, en principio creímos que se trataba de elecciones al azar; pero
fuimos descubriendo que no era así.
Siempre pensamos que los
alienígenas estaban buscando en estas personas algo específico y que tal vez,
esa búsqueda tenía que ver con la biología humana, su forma de reproducción y
por lo tanto su genética.
Ese tópico estaba muy
fuera de nuestro alcance. Saber si los visitados tenían genéticamente algo en
común, era casi una utopía. Nuestros medios económicos no nos podían permitir
realizar comparaciones con análisis genéticos entre los testigos que estábamos
investigando.
Por eso intentamos saber
si el tipo de sangre coincidía y allí encontramos una primera pista del
fenómeno: La mayoría de nuestros testigos tenían el mismo grupo y factor
sanguíneo.
Inmediatamente, a través
del seguimiento, encontramos que las experiencias de abducciones y visitas de
estos seres se extendían a la familia y no a un solo integrante, por lo tanto
no eran elecciones al azar. Eso confirmaba que lo que se buscaba tenía relación
con la genética de algunos grupos de personas especialmente.
Vimos luego que la
sangre de los hijos de los protagonistas cambiaba, no siendo ni la de uno u
otro de sus progenitores ni la combinación de ambos. Otra pista interesante, en
la que se daba cuenta de mutaciones genéticas.
Siguiendo muy de cerca
los casos, descubrimos que las experiencias comenzaban en la infancia de los
protagonistas. Por lo tanto, la lógica nos decía que el fenómeno venía desde
generaciones anteriores extendiéndose aún en el presente y que por lo visto,
seguiría extendiéndose en tiempos futuros.
En los protagonistas,
luego de las experiencias, quedaban cicatrices y marcas. Algunas en zonas
óseas, como la clavícula o la cadera, daban pautas de que se extraía tejido de
ellas. Otras, aparecían en zonas de tejido blando, dando la impresión de que se
había colocado algún elemento a través de ellas.
Pudimos comprobar que
luego de la visita, la cantidad de glóbulos blancos del protagonista se
incrementaba como respuesta a la intrusión. Esa condición daba prueba de la
experiencia, además de encontrar las cicatrices en el cuerpo de la persona y
las manchas de sangre en su cama, sin constancia de ninguna infección.
Pero de ninguna manera
podíamos saber qué elementos extraían del organismo en esas intrusiones, salvo
las extracciones de sangre, por los hematomas clásicos en los brazos,
exactamente como ocurre cuando se hacen análisis clínicos convencionales.
Pero, seguimos
insistiendo en la investigación y pudimos llegar a que un excelente profesional
médico nos asistiera en ésta.
Creemos haber encontrado
algunas pistas muy importantes en cuanto a las experiencias a las que son
sometidos los elegidos. Y estamos absolutamente seguros que son elegidos, que
nada de lo que hacen estos seres extraños es al azar, que hay una dirección
inteligentemente llevada a lo largo de siglos y que hay un propósito importante
detrás de todo este fenómeno, sin saber para cual de las dos especies, la
humana o la extrahumana, se ha puesto en funcionamiento..”
LA IMPORTANCIA DE LA EVALUACIÓN MÉDICA EN ESTOS EPISODIOS
Cuando estudiamos los
casos de Visitantes de Dormitorio en la Zona Norte del Gran Buenos Aires,
pudimos acercar a algunos de los protagonistas a la consulta con un facultativo
muy capacitado, especialista en Terapia Intensiva, con formación
multidisciplinaria y, afortunadamente, una mente abierta para ayudarnos con
este tema tan álgido y fuera de lo común. El Doctor (N) se desempeña como
Director de un importante Sanatorio de la Provincia de Buenos Aires. Aceptó
examinar a los pacientes ligados a estos casos, sólo dando informes médicos,
sin entrar en la investigación que nosotros estamos llevando a cabo.
Desde que comenzamos con
estas investigaciones, hemos encontrado algunos patrones comunes en los
visitados, entre ellos, repetimos, el tipo de sangre, un Cociente Intelectual
elevado, el fenómeno se produce desde los ancestros y se continúa en la
descendencia, dándose por familias. Son comunes también las cicatrices en zonas
específicas del cuerpo, y con respecto a éstas, si eran recientes, tuvimos
oportunidad de que el protagonista se hiciera un análisis de sangre con
recuento de glóbulos, lo que en todas las oportunidades dieron un registro de
glóbulos blancos lo suficientemente altos como para diagnosticar una infección,
aunque ésta fuera inexistente. En los visitados aparecen síntomas de Trastornos
de Estrés Post Traumático, similares a los que se producen en situaciones de
extrema violencia, guerras, violaciones o desastres naturales.
Por supuesto, estamos
detrás de los “por qué” del fenómeno”.
Extraído
de entrevistas y del material del libro Terror Nocturno de Eduardo y Liliana
Grosso.
DIAGNÓSTICO
DIFERENCIAL
Es
importante descartar cuadros psicopatológicos, afecciones neurológicas y
fenómenos de naturaleza psíquica que pueden ser confundidos o vividos incluso
como experiencias anómalas. Mencionaremos algunos ejemplos clásicos:
1.
Evaluar antecedentes familiares, laborales y personales de cualquier tipo.
2.
Descartar fraude y fabulación. Corresponde al investigador o grupo recabar
información lo más completa posible. Correponde al psicólogo administrar
cuestionario Atramic de la mentira informada y/o EPQ (EPI)
3.
Evaluar historia vital del sujeto (situaciones traumáticas en infancia que han
influido o alterado su desarrollo. Explorar la posibilidad de distintas formas
de abuso).
4.
Evaluar y descartar sujetos con perfiles de personalidad fabuladores y
controladores (psicopatías, trastorno narcisista de la personalidad con o sin
Munchäusen).Este síndrome fue descripto en 1951 por el Dr. Asher y se refiere a
aquellas personas que necesitan contar historias extravagantes para llamar la
atención. Aunque los verdaderos abducidos generalmente han rehuido de la
publicidad y solo narre la experiencia a los investigadores o a sus terapeutas,
en la actualidad vemos un sinnúmero de personas que dicen ser abducidas
participando de entrevistas periodísticas de medios poco o nada confiables,
podcast o en plataformas de youtube. Algunos de ellos muestran claros signos de
fabulación, exageración o de victimización para atraer la atención pública.
Estas personas, no necesariamente buscan beneficio económico sino más bien la
aceptación pública. Se ha descubierto en estos casos la ausencia de apoyo y
valoración de las figuras parentales.
5.
TLP (Personalidad Borderline). Se sospecha de automutilaciones y una severa
inestabilidad estructural en estos casos (A estructuras).
6.
Psicosis productivas con episodios alucinatorios auditivos y visuales.
7.
Nucleos de carácter traumático infantil reprimidos (las personas no registran
muchos hechos de su infancia o el registro es inadecuado o distorsionado) que
se dan en casos de presencia de abuso físico o sexual en edades tempranas.
En
general los abducidos genuinos son personas ordinarias en situaciones
extraordinarias, con un fuerte sentido de resiliencia. El porcentaje de
aparición de este tipo de experiencias se da en las mujeres y en segundo lugar
en los hombres. Muchos de ellos han tenido estos encuentros desde la niñez. Y
existe un predominio de evidencias en dirección a la transmisión de la misma a
su descendencia. Estas inteligencias parecen trabajar en una línea de
transmisión generacional (de padres a hijos). El interés en la genética
particular, la tipología sanguínea específica, en algunos casos desaparición de
fetos (solo conozco referencias de esto en Estados Unidos y países europeos). Pero
también la descendencia (hijos) hereda un sistema inmunológico fuertemente
desarrollado, e incluso, los antecedentes de algunas mujeres muestran que
previamente a las experiencias, (que principian en la entrada a la adolescencia)
tenían dificultades para concebir.
En
una segunda parte evaluaremos las evidencias que se presentan como adicionales
(de origen externo tales como efectos EM, fotos videos y audios y el grado de
validez de las mismas